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Qué es Slack: Guía completa sobre la plataforma de comunicación y trabajo en equipo
Slack centraliza la comunicación y colaboración interna en empresas y equipos.
Organiza conversaciones por canales, integrando archivos, bots y aplicaciones externas.
Permite automatizar tareas, mejorar la productividad y adaptarse a empresas de cualquier tamaño.
Ofrece opciones avanzadas de seguridad, control y personalización para entornos profesionales.
Las nuevas formas de trabajar han multiplicado la necesidad de herramientas que faciliten la comunicación fluida, la colaboración eficiente y el trabajo simultáneo entre personas, equipos y empresas. Con la llegada del teletrabajo y el auge de los equipos distribuidos, herramientas como Slack se han convertido en piezas clave en miles de compañías de todos los tamaños y sectores. Pero, ¿sabes en realidad qué es Slack, cómo funciona y por qué es tan popular?
En este artículo descubrirás en profundidad todo sobre Slack: sus orígenes, funcionamiento, características, utilidades prácticas, integraciones, ventajas y algunas limitaciones. Si necesitas comunicarte mejor en tu trabajo, buscas optimizar la gestión de equipos, o simplemente quieres conocer qué hace especial a una de las herramientas colaborativas más usadas del mundo, aquí tienes una guía definitiva, elaborada con toda la información útil y contrastada disponible hasta el momento.
Slack es una aplicación de mensajería instantánea y colaboración basada en canales, diseñada principalmente para entornos profesionales y empresas. Nació en 2013, desarrollada inicialmente como una herramienta interna por la empresa Tiny Speck durante el desarrollo de un videojuego online, y su popularidad se disparó en pocas semanas. Su nombre proviene del acrónimo «Searchable Log of All Conversation and Knowledge» (Registro Buscable de Toda la Conversación y Conocimiento), reflejando su misión de ser mucho más que un simple chat: un verdadero hub donde centralizar la comunicación y el conocimiento interno de equipos y compañías.
En esencia, Slack permite que los miembros de una organización se comuniquen de forma rápida y organizada a través de mensajes, llamadas de voz y videollamadas, compartan archivos, colaboren en proyectos y gestionen tareas, todo ello desde una plataforma centralizada y fácil de usar. Esta flexibilidad es precisamente la que explica su enorme éxito: desde una startup hasta una gran multinacional, pasando por comunidades online, grupos de interés y organizaciones sin ánimo de lucro, todos pueden beneficiarse de una herramienta que une la inmediatez del chat con la estructura y polivalencia de una intranet moderna.
Historia y evolución de Slack
El origen de Slack se sitúa en la necesidad de comunicación interna de un equipo de desarrollo de videojuegos. Stewart Butterfield, fundador de Tiny Speck, lideró el proyecto Glitch, y necesitaban una plataforma donde centralizar la información y los mensajes del equipo. Así, a partir de 2012, empezó a gestarse Slack —cuyo nombre, como ya hemos visto, es un acrónimo que refleja su filosofía.
Slack se lanzó públicamente en agosto de 2013 y la respuesta fue inmediata: solo en las primeras 24 horas, 8.000 empresas se registraron en la plataforma. A partir de ahí, el crecimiento fue espectacular: a lo largo de 2015, ya sumaba más de 135.000 empresas clientes de pago y una base de cientos de miles de usuarios activos diarios. En 2019, tras una exitosa salida a bolsa, Slack reportaba más de 10 millones de usuarios activos diarios en más de 150 países.
En 2021, Salesforce adquirió Slack por unos 27.700 millones de dólares, integrando así la herramienta en su ecosistema y consolidándola como plataforma de referencia para la comunicación, gestión de proyectos y colaboración empresarial. Conoce más sobre Slack en su web oficial.
Slack está orientado tanto a pequeñas como a grandes empresas, pero su flexibilidad permite su uso en una amplia variedad de contextos. Desde grupos de trabajo en sectores tan dispares como la ingeniería, la contabilidad, el periodismo, la hostelería o la abogacía; hasta comunidades online, asociaciones, equipos de ventas o departamentos de atención al cliente, todos pueden adaptar Slack a su flujo de trabajo.
Además, Slack se adapta a diferentes tamaños de empresa: desde equipos de 2 a 10.000 usuarios o más pueden utilizarlo como plataforma central de comunicación, evitando el caos del correo electrónico y las conversaciones dispersas.
¿Cómo funciona Slack? Conceptos clave
Slack estructura la comunicación y la información en torno a los «espacios de trabajo» y los «canales». A continuación tienes los conceptos clave que debes conocer:
Espacio de trabajo: Corresponde a una empresa, organización o comunidad. Cada espacio de trabajo es independiente, tiene sus propias configuraciones, usuarios y canales.
Canales: Son salas de chat organizadas por temática, departamento, proyecto o cualquier criterio útil. Los canales pueden ser públicos (visibles para todos los miembros del espacio de trabajo), privados (solo accesibles por invitación) o compartidos (para colaboración con otros equipos o empresas externas).
Mensajes directos: Permite enviar mensajes privados entre dos o más personas (hasta 9 en un grupo), fuera de los canales colectivos.
Slackbot: Es el asistente virtual de Slack, integrado por defecto, que ayuda a los usuarios a crear recordatorios, responder preguntas frecuentes o automatizar pequeñas tareas cotidianas.
Integraciones y aplicaciones: Slack puede conectarse con cientos de aplicaciones y servicios externos (Google Drive, Asana, Trello, Zoom, Zendesk, Twitter, etc.), permitiendo que casi todas las herramientas que usa un equipo estén disponibles e interconectadas en un solo sitio.
Historial y búsqueda: Todos los mensajes, archivos y enlaces compartidos se archivan y pueden buscarse fácilmente, lo que facilita encontrar cualquier conversación o documento importante. En la versión gratuita hay un límite de consulta de los últimos 10.000 mensajes, que desaparece en los planes de pago.
Slack se puede usar directamente desde cualquier navegador, con aplicaciones para Windows, macOS y Linux, y con apps móviles para iOS y Android. Incluso existe una versión para Apple Watch, para estar siempre al tanto de las conversaciones o recibir notificaciones al instante.
Comunicación estructurada y eficiente: A través de canales, puedes organizar las conversaciones por equipos, proyectos, ubicaciones, temáticas o lo que mejor se adapte a tu empresa.
Gestión de archivos: Slack permite compartir, almacenar y buscar archivos fácilmente. Además, integra funciones para administrar archivos privados, guardar notas de interés e incluso compartir pantalla durante llamadas.
Llamadas de voz y videollamadas: Los usuarios pueden realizar llamadas dentro de la app, tanto de voz como de vídeo, e incluso compartir pantalla para presentaciones o trabajo colaborativo en tiempo real.
Integraciones: Uno de los mayores puntos fuertes son las integraciones con otros servicios como Google Calendar, Google Drive, Asana, Trello, Zoom, Zapier, Zendesk, Twitter, y muchos más. Así, puedes recibir notificaciones, consultar tareas, gestionar tickets de soporte o actualizar proyectos sin salir de Slack.
Automatización y flujos de trabajo: Slack permite crear flujos de trabajo personalizados (Workflows) para automatizar tareas repetitivas, como aprobar solicitudes, enviar recordatorios o recopilar información de diferentes usuarios.
Atajos de teclado y accesibilidad: Aporta accesos rápidos (como el Quick Switcher), comandos de barra diagonal y opciones de accesibilidad (incluidos lectores de pantalla y soporte para diferentes dispositivos y sistemas operativos).
Sistema de notificaciones flexible: Configura notificaciones personalizadas por canal, por palabras clave, o incluso ajusta el horario de «no molestar» para no recibir interrupciones fuera del tiempo laboral.
Tematización y personalización: Desde temas visuales hasta emojis personalizados, Slack permite adaptar la experiencia para reflejar la cultura organizacional de cada empresa.
Seguridad y privacidad: Slack ofrece autenticación en dos factores, inicio de sesión único (SSO), cifrado de extremo a extremo y opciones avanzadas para empresas con necesidades de cumplimiento normativo y protección de datos.
La principal razón es la mejora sustancial en la comunicación interna y el trabajo en equipo. Al centralizar mensajes, archivos, tareas y notificaciones, se reducen los malentendidos, se agilizan decisiones y se mantiene la información organizada y accesible. Slack facilita la colaboración deslocalizada, permitiendo que equipos de diferentes departamentos, países o husos horarios trabajen como si estuvieran en la misma oficina. Además, el sistema de canales fomenta la transparencia, evitando la típica dispersión del correo electrónico y agrupando la información relevante donde debe estar. A esto hay que añadir la flexibilidad para adaptarse a nuevos proyectos, la facilidad para incorporar nuevas personas a canales ya existentes (con posibilidad de consultar el histórico de conversaciones) y la total integración con otras herramientas de uso diario.
Slack en cifras: popularidad y casos de uso
Slack cuenta con más de 10 millones de usuarios activos diarios y miles de empresas de todos los tamaños, habiéndose convertido en líder de la comunicación empresarial en tan solo una década. Grandes organizaciones, universidades, pymes y startups encuentran en Slack una plataforma fiable, segura y en constante evolución para adaptarse a las nuevas necesidades de la digitalización.
Algunas cifras y datos destacados sobre Slack:
Más de 600.000 organizaciones usan Slack alrededor del mundo.
Se estima que en grandes empresas los empleados envían más de 200 mensajes de Slack por semana.
La integración de IA permite sintetizar conversaciones, resúmenes y búsqueda inteligente en canales y hilos, agilizando la gestión de información.
Slack fue adquirida en 2021 por Salesforce, lo que supuso su integración con uno de los mayores ecosistemas empresariales del mundo.
Slack soporta oficialmente plataformas Windows, macOS, Linux, iOS y Android, además de un cliente web muy versátil.
Ventajas y beneficios clave de usar Slack
Mayor rapidez en la toma de decisiones: Gracias a la comunicación directa, inmediata y segmentada, los equipos resuelven dudas y avanzan en proyectos mucho más rápido que por email.
Organización de la información: La estructura por canales y la potente búsqueda facilita que nada se pierda, y todo sea fácil de localizar incluso meses después.
Reducción del correo electrónico: Al mover la comunicación interna a Slack, se reduce el tráfico de emails y se evita el caos de cadenas interminables.
Facilidad para integrar nuevas personas: Basta con añadir a alguien a un canal para que, de inmediato, pueda acceder a la información histórica y ponerse al día.
Colaboración en tiempo real: Las integraciones con otras plataformas y la posibilidad de compartir pantalla o archivos agilizan muchísimo los procesos colaborativos.
Escalabilidad: Desde equipos de 2 personas hasta empresas con miles de empleados pueden tener un espacio de trabajo gestionable y flexible.
Slackbot es un asistente virtual integrado que ayuda a realizar tareas sencillas, resolver dudas frecuentes e incluso automatizar procesos rutinarios. Algunas de sus funciones más útiles incluyen:
Establecer recordatorios para ti o miembros del equipo.
Organizar archivos y guardar notas importantes.
Respuestas automáticas a preguntas frecuentes de los usuarios.
Integrar chatbots de terceros o personalizados para soporte, ventas o atención al cliente.
La API de Slack permite además crear apps a medida, automatizar flujos de trabajo y conectar la plataforma con sistemas internos de la empresa.
Integraciones y aplicaciones compatibles
Una de las grandes fortalezas de Slack es su ecosistema de integraciones, permitiendo conectar la plataforma con decenas de servicios populares. Estas integraciones mejoran la productividad al centralizar las notificaciones, simplificar el acceso a documentos y automatizar tareas transversales.
Herramientas de gestión de proyectos: Asana, Trello, Jira, Monday.com
Almacenamiento y productividad: Google Drive, Dropbox, Box, Microsoft OneDrive
Calificación y agenda: Google Calendar, Outlook Calendar
Automatización y marketing: Zapier, IFTTT
Atención al cliente: Zendesk, Salesforce, Cliengo
Videollamadas y presentaciones: Zoom, Google Meet
Productividad y diversión: Giphy, Twitter, GitHub
Seguridad, privacidad y gestión de usuarios
La seguridad de la información es una prioridad en Slack, especialmente en entornos empresariales sensibles. Slack ofrece, dependiendo del plan, diferentes niveles de protección:
Cifrado de datos en tránsito y en reposo.
Inicio de sesión único (SSO) y autenticación reforzada.
Controles avanzados de acceso y permisos por canal y usuario.
Posibilidad de auditar accesos, exportar registros de actividad y cumplir con normativas internacionales (GDPR, HIPAA, etc.).
Es importante destacar que en 2018 hubo críticas por un cambio en la política de privacidad, permitiendo a los administradores acceder a mensajes privados y públicos sin consentimiento expreso de los usuarios. Desde entonces, Slack ha ido mejorando los controles de acceso y la transparencia en la gestión de datos.
Limitaciones y críticas a Slack
A pesar de ser una plataforma líder, Slack también ha recibido críticas y presentado algunas limitaciones:
En el plan gratuito, solo se puede buscar entre los últimos 10.000 mensajes, lo que puede ser insuficiente para grupos grandes o proyectos de larga duración.
El almacenamiento en la nube y la dependencia de servidores externos ha sido objeto de debate en sectores muy sensibles con la privacidad y el control de datos.
Los costes pueden aumentar si el número de usuarios y la necesidad de integraciones avanzadas crecen.
La gran cantidad de notificaciones y canales puede llegar a saturar si no se gestiona adecuadamente la configuración y los permisos.
La imposibilidad de indexar conversaciones públicas mediante motores de búsqueda limita la recuperación de información en proyectos open source, en comparación con listas de correo convencionales.
No obstante, las ventajas y beneficios superan ampliamente estas limitaciones si se configura bien el entorno de trabajo y se forma a los usuarios adecuadamente.
Slack en la realidad: ejemplos de uso y escenarios prácticos
Slack se utiliza en multitud de escenarios reales, desde el intercambio de información interna en pequeñas startups, hasta la coordinación de grandes equipos multinacionales en tiempo real.
Algunas aplicaciones prácticas incluyen:
Gestión ágil de proyectos, permitiendo que todos los implicados estén al tanto de actualizaciones, tareas y cambios sin perder información.
Atención al cliente: integraciones con sistemas de tickets como Zendesk o Cliengo permiten recibir notificaciones instantáneas sobre incidencias y resolver problemas de manera más rápida.
Automatización de alertas o flujos de trabajo: por ejemplo, notificaciones por fallos en pagos, actualizaciones de software o incidencias técnicas.
Comunicación entre departamentos dispersos o equipos de trabajo remoto, manteniendo la productividad y la cohesión.
Organización de eventos, reuniones o webinars, incluyendo la coordinación de agendas y el envío automático de recordatorios.
Todo esto hace que Slack sea un verdadero «multiplicador» de la productividad y el trabajo colaborativo, con una barrera de entrada baja y una curva de aprendizaje muy rápida.
Planes, precios y alternativas
Slack ofrece un modelo freemium, con un plan gratuito y varios planes de pago que se adaptan a las necesidades de cada organización. El plan gratuito es perfecto para pequeños equipos, aunque tiene limitaciones en el histórico de mensajes y el número de integraciones. Los planes de pago desbloquean funcionalidades avanzadas como:
Histórico ilimitado de mensajes
Integraciones ilimitadas
Llamadas grupales avanzadas y uso compartido de pantalla
Mayor almacenamiento por usuario
Controles avanzados de seguridad y cumplimiento
Puedes consultar la información más actualizada sobre precios y planes en la web oficial de Slack.
Aunque Slack es la referencia, existen alternativas como Microsoft Teams, Google Chat o Discord que pueden ser consideradas para necesidades muy específicas, aunque ninguna hasta ahora ha alcanzado su nivel de integración, personalización y adopción global en el ámbito empresarial.
Curiosidades y hechos destacados sobre Slack
Slack nació como una herramienta interna, pero su potencial fue tal que superó el proyecto original (el videojuego Glitch) para el que fue creada.
Ha sido galardonada como la mejor startup del año en los Premios Crunchies organizados por TechCrunch.
El grupo EFF (Electronic Frontier Foundation) reconoce a Slack por sus buenas prácticas en privacidad, aunque también advierte sobre limitaciones y cambios de políticas que pueden afectar la protección de datos.
Slack ha experimentado interrupciones globales en algunos momentos clave debido al enorme volumen de usuarios, aunque siempre ha restablecido el servicio en cuestión de horas.
Los canales de Slack no son indexados por buscadores públicos, lo que supone un punto a favor en privacidad, pero una debilidad para proyectos open source o documentación accesible.
Slack se ha consolidado como la plataforma de referencia para la comunicación interna y la colaboración en el trabajo, integrando mensajería, archivos, videollamadas, automatización e integraciones con cientos de servicios.
